CESFAM Juan Pablo II

¿Cuándo acudir a urgencia en tiempos de pandemia?

Durante esta pandemia sabemos que debemos realizar sólo las actividades imprescindibles. Esto también es extensible a las atenciones de Salud. En este caso, se debe realizar sólo aquellas indispensables, con el objeto de prevenir el contagio por Covid-19. En este contexto, más que nunca, toma relevancia que  los padres y cuidadores  conozcan los aspectos que puedan significar un grave riesgo a la salud para hijos e hijas, y qué debe hacer consultar a un servicio de urgencia.

Una forma general de evaluar la gravedad, tiene  que ver con considerar tres aspectos: la apariencia , la respiración, y la circulación de la piel.

  1. La apariencia: Es anormal que el niñ@ no responda a los estímulos, que tenga perdida de fuerza, no lo puedan despertar o le cueste despertar, que llore y no se calma con los cuidadores, que tenga movimientos anormales, o no pueda movilizar alguna extremidad, que el niñ@ no fije la mirada en las caras o los objeto, que no tenga el lenguaje habitual que tenía hasta ese momento, decaimiento marcado y rechazo alimentario especialmente en niños menores a 1 años, aún sin fiebre (come menos de la mitad de lo que come habitualmente).
  2. La respiración: Podemos escuchar ruidos anormales (silbidos, quejidos, ronquera, ruido al tomar aire). También es anormal respirar rápidamente en reposo, que se hundan las costillas o arriba de la clavícula, abrir   exageradamente las fosas nasales, también posiciones extrañas (por ej., sentarse con el dorso hacia adelante).
  3. La circulación de la piel: Los principales indicadores de alerta son: palidez, piel morada (labios, uñas), piel moteada o reticulada, piel grisacea.

Cualquier alteración de uno o más de estos tres aspectos se debe consultar. Otros aspectos a considerar son la presencia de los siguientes síntomas o signos:

Acudir a urgencia en tiempos de pandemia debe ser en situaciones graves o de potencial gravedad. Para ello es importante evaluar el aspecto, la respiración y la circulación del niñ@ y considerar alguno de los signos o síntomas   de cuidado, como son los anteriormente descritos.

Referencias

Autora: Dra Pilar Monsalve

Este artículo es parte de un proyecto generado por el grupo de estudio e intervención telesalud UC:

Exit mobile version
Close Bitnami banner
Bitnami